• «Albert Serra vuelve con una saga apocalíptica ambientada en Tahití en una de sus películas más logradas y maduras hasta la fecha.» David Jenkins, Little White Lies

    «Serra es un cineasta increíble y ésta es su película más salvajemente expresiva hasta ahora.» Rory O’Connor, The Film Stage

    «Siempre que se mantenga el ritmo exuberantemente gradual de la película… hay recompensas aquí incluso para los espectadores más desconcertados atrapados en su marea.» Guy Lodge, Variety

    «Sólo puedo decir que me cautivó la película y su sigilosa evocación del mal puro.» Peter Bradshaw, Guardian

    «Serra reelabora muchos temas que han atravesado todo su cine, como la pulsión de la muerte –Historia de mi muerte–, la libido enfermiza que se apodera de las tinieblas –Liberté– o todo el universo conspiratorio en torno a la avaricia social que estaba presente en la instalación Singularity, quizás el esbozo de muchas ideas de Pacifiction.» Àngel Quintana, Caimán Cuadernos de Cine

    «…La película está rodada con auténtico virtuosismo, con imágenes espectaculares en las que deslumbra el uso del paisaje, pero también a partir de un extraordinario control del tiempo para que, de forma efectiva, el camino hacia la oscuridad penetre en la conciencia del espectador.” Àngel Quintana, Caimán Cuadernos de Cine

    «Pacifiction es una película en muchos sentidos sobre flotar, a través de la vida y el agua y el poder, invitando al espectador a ir a la deriva con ella.” Guy Lodge, Variety

  • «El talentoso realizador rumano sorprende (y convence) con un thriller noir que se desmarca de su filmografía previa y de casi todo el cine reciente de su país.»
    –Diego Lerer: Micropsiacine

    «La placentera perspectiva de Corneliu Porumboiu acerca de las pelícuas de estafas tiene su encanto propio.»
    –Eric Kohn: IndieWire

    «Pelicula art house noir que sobresale de entre muchas otras.»
    –Leslie Felperin: The Hollywood Reporter

  • «Opacidad y ambigüedad se entrecruzan de forma hipnótica (…) Una evocación delicada y empática de la feminidad.»
    —Neil Young: The Hollywood Reporter

    «Alché crea una burbuja especial de nostalgia y locura que es fascinante de experimentar (…) La fotografía de Héléne Louvart invoca el estado mental inestable.»
    —Martin Kudlac: Screen Anarchy

    «La directora externaliza las visiones de la protagonista para que el espectador también pierda la capacidad de distinguir entre lo real y lo falso (…) Una odisea emocionante.»
    —Carlota Moseguí: Cineuropa

    «Una película por momentos inasible e indescifrable, pero que finalmente resulta tan entrañable como fascinante. Una ópera prima de una audacia y una madurez infrecuentes incluso en el ámbito de un cine argentino que siempre está dispuesto al riesgo.»
    —Diego Batlle: OtrosCines.com

    «Asombrosa fluidez tras la cámara a la hora de encontrar una secreta armonía entre lo aparentemente irreconciliable (…) Uno podría pasarse una eternidad contemplando a Mercedes Morán a través de los ojos de María Alché.»
    —Jordi Costa: Diario El País

    «Alché nunca pierde de vista la verdad emocional de los personajes. Y gracias a la actuación de Morán, construyen a una protagonista tan reconocible como inasible.»
    —Diego Lerer: MicropsiaCine.com


  • « La Casa Lobo explora la propia idea de hogar, de familia, como algo perverso y al mismo tiempo acogedor, un lugar necesario al que volver siempre, pero en el que se esconden y nacen nuestros miedos más profundos. En todo caso, y más allá de interpretaciones psicoanalíticas, la película es un ejercicio magistral de construcción y exploración cinematográfica de un espacio, que a la velocidad del stop-motion, no deja nunca de mutar, y que es mucho más que un escenario en el que albergar la trama. Aquí, los personajes y la casa son un todo, la casa es personaje, los personajes son el hogar, y todo ello es al mismo tiempo el proceso de documentación del proceso de realización de la película, que no solo no esconde, sino que evidencia, la manipulación manual de los espacios, las figuras, y los dibujos. La película contiene además un aterrador viaje hacia una suerte de realismo perverso, que más aterrador es conforme más se acerca a una representación realista o veraz. Es esa tensión de lo real como algo terrorífico lo que habita en el corazón de La Casa Lobo. Lo terrorífico no es solo ese hogar perverso, sino la forma en la que ese hogar y sus habitantes se parecen cada vez más a los humanos que los crearon y a los que los contemplan. En ese viaje hacia el realismo, los personajes de La Casa Lobo se convierten en seres más extraños, más oscuros, más siniestros. Más nosotros que nosotros mismos..»
    – Gonzalo de Pedro: Otros Cines España

    «Cada imagen de su película visualmente asombrosa y horrorosa (. . .) La película explora, de manera visceral, cómo una cosa puede transformarse en otra a través de un proceso muy fluido, convirtiendo cualquier momento en un rincón oscuro”.
    – The New York Times

    “Un viaje al submundo de las fantasías (pesadillas) más oscuras concebido con una creatividad apabullante”.
    – Otros cines

    “La casa lobo nos regala una animación que cruza la línea entre lo bello y lo grotesco”.
    – Screen International

    “Un ejercicio hipnótico donde lo que se discute en última instancia es la propia consistencia de la imagen, del cine”.
    – El Mundo

    «La casa lobo ofrece una experiencia inquietante».
    – The Hollywood Reporter

  • «No hay diligencias en este intenso y agudo drama sobre la discordia germano-búlgara. El espíritu de John Ford lo honra».
    — Guy Lodge, Variety

    «Un estupendo estudio existencial de la masculinidad».
    — Revista Sight and Sound

    «Un poderoso drama profundamente humano e intrínsecamente político que recuerda al cine poema Beau Travail de Claire Denis».
    — Daniel Kasman, MUBI Notebook

    «Valeska Grisebach utiliza los tropos del género occidental para contar una historia que resuena a nivel mundial».
    — Peter Kelly, Director de distribución de Cinema Guild

  • Los viajes del viento es una singular road movie a través de la tierra de la música vallenata. Un viaje por regiones inexploradas, de geografía exuberante, una celebración de la música y las tradiciones más ricas de nuestro continente.

    “Esta es la historia de un viaje. Un viaje hacia el principio, hacia el espíritu, hacia nuestra alma. Hacia aquello que unió a nuestra raíz blanca, negra y nativa en algo único. Único como la música que de ahí surgió. Durante siglos nos hemos preguntado qué es lo que nos separa; ahora es tiempo de preguntar qué es lo que nos une. Eso que nos unirá a dos seres errantes, Ignacio y Fermín, vagabundos en busca de algo que necesitan, pero que desconocen. Que nos llevará junto a ellos a descubrir nuevos mundos, nuevas aventuras, nuevas almas. Todo contado con el esplendor de una tierra, nuestra tierra, aún desconocida por nosotros mismos, como telón de fondo. Y al final, el principio. Y otro viaje más”.

     

    Ciro Guerra, Director

  • «Te prometo anarquía es el puro tránsito, largas secuencias contemplativas y que suspenden el hilo narrativo para congelar la acción, como aquella que filma a sus personajes con sus tablas de skate por las calles. La progresión de relato siempre está comprometida, sometida a digresiones que capturan lo pasajero, que dan fe de lo auténtico, como si fuese una crónica de lo real. Es un presente como prisión, en una zona de peligro y de violencia, donde todo está destinado a desaparecer, en el umbral de aquello que se mueve pero no se vive»
    – Manu Argüelles: Cine Divergente

  • «Jarmusch habla no con ideas sino a través de los objetos» para asegurarle al estómago algo que importa en su universo icónico: el gusto viene de saborearse, de saber y sabor, de probar con los sentidos a las cosas y luego, en este caso, llevarlas al plano cinematográfico, a la degustación, como lo ha hecho en tantos años de gestos y sabores, café y cigarrillos, para que sus personajes logren mantenerse con vida a través de la rutina.»
    – Carlos Rgó: Revista Incónica

    «El vivir nuestro de cada día, el milagro de lo cotidiano y el arte poético se conjugan en un filme simple pero hermoso».
    – William Venegas: Nación

    «Paterson, su película más lograda en mucho tiempo y uno de sus proyectos más celosamente personales, está financiada por los Amazon Studios de Jeff Bezos, recién coronado como la persona más rica en el planeta; una paradoja más que echa leña a la encendida polémica entre el cine de estudios tradicionales y el cine impulsado por compañías online».
    – Sergio Huidobro: CinePremiere

    «En una de sus mejores películas de tiempos recientes, Jim Jarmusch plantea un juego de cajas chinas entre el personaje de la cinta, la ciudad donde transcurre y el homenaje al poeta WIlliam Carlos Williams. Es una historia simple que no se aleja del estilo del director, un cine de lo esencial compuesto de gestos mínimos, diálogos breves e imágenes contundentes, con un tono característico de humor seco».
    – Fernanda Solórzano: Letras Libres

  • «La travesía mostrada en largas y apacibles tomas de ambos personajes cruzando los enormes deltas del río, se trastoca la mañana en la que una sorpresa deja al «hombre blanco» indefenso ante el territorio desconocido en el que se encuentra y en el que la soledad, la desesperación, la ansiedad y el descentramiento serán los motores de la lucha por su propia supervivencia».
    — Hans Lucas: EnFilme

    «El río solía ser hombre parece hablarnos sobre una relación, la del protagonista, con todo el entorno que le rodea; pero no sólo un entorno en el que permanece perdido durante los primeros compases del film, sino también aquel que nos remite al folklore y la leyenda cuando, por fin, consigue encontrar rastros de vida humana, de sociedad».
    — Cine Maldito

    «El río solía ser un hombre es una cinta llena de emotividad, que toca el nervio y que de manera muy simple logra hablar de un mundo completamente extraño».
    — Goethe Institute

    «Las imágenes de El río solía ser hombre articulan una plástica de los dominios del delta africano. Desde el encuentro del muchacho hasta la jornada final, el filme es contemplación. La vastedad de la planicie se impone con extensiones de verdor bronceado y rumores de naturaleza en directo. Es una película-atmósfera que acumula texturas visuales y sonoras como si fueran caras y voces».
    — Rodrigo Martínez: Punto en línea

  • «Retjman logra una película hipercalculada, de una extraña belleza y lirismo. Las atribuladas critaturas de su cine, el malestar que arrastra cada una de ellas, no alcanzan a enturbiar un relato lleno de recovecos, desprendimientos y sopresas. Elige tu propia aventura».
    – Diego Batlle: Oros Cine

    «La más nueva película del director argentino es una comedia con tonos serios, excéntrica que nos presenta una serie de historias entrelazadas. Rejtman es una voz importante en el cine de Argentina y Dos disparos es consistente y sin recatos».
    – Film Capsule

    «La primer película de Rejtman en una década es una comedia fascinante y digresiva con el peso de una novela existencialista. El director nos cuenta la historia con compasión y formal atrevimiento, yendo y viniendo entre relatos».
    – Film at Lincoln Center